Como decía Harry S. Truman, la libertad es el derecho a escoger a las personas que tendrán la capacidad de limitárnosla.  Pero para ejercer esa libertad libertad es preciso estar bien informado.  Con estas dos ideas, es tristemente habitual que cuando en el Poder encontramos a un grupo que niega el pluralismo político, éste haga lo posible para manipular la información.

No queremos sacar conclusiones, pero es significativa la desproporción de medios empleados cuando el Sr. Rector pone en marcha el autobombo y cuando se anuncia el comienzo de un período de elecciones a Claustro.

Sin ir más lejos, qué reflejos, qué poderío económico, qué despliegue el día siguiente de la proclamación de La Ciudad de Alcalá como Patrimonio de la Humanidad.  Cientos de carteles a todo color con letras grandes, hermosos en suma, colocados muchos de ellos en lugares auténticamente privilegiados -junto a los aparatos de fichar, en las puertas de entrada- , no en los normalmente caóticos y mal ubicados tablones de anuncios...

Y por supuesto, -no puedo equivocarme- en menos de una semana tendremos la consabida carta en papel de barba, membrete en altorrelieve ¿nos sorprenderán esta vez con algún ribete en pan de oro? expresando la enorme satisfacción que supone para "la institución" el haberse hecho merecedora de ...

Es una maldad, lo sabemos, pero después de leerla es interesante comparar su contenido con la de la resolución de la UNESCO http://www.unesco.org/whc/sites/876.htm, que curiosamente se encuentra también, de forma inmediata, en el Web de la Universidad http://www.alcala.es/novedades.

Por supuesto, es vergonzoso comparar lo visto (y lo que nos espera al respecto, ya digo) con el anuncio de las elecciones a Claustro.  Que yo sepa, ni carteles llamativos ni publicación de información alguna en el servicio de Web de la Universidad (ni cartas personalizadas, claro).

Comparen, por favor.

Luego (es decir, después de las elecciones) se mostrará preocupación por la "baja participación" y "la abulia" de estas débiles generaciones.

El daño es muy grave.  Muy muy grave.  Como diría el poeta, lloro por la Universidad y lloro también por mí.

Son tiempos difíciles, pero ya saldremos.

Alcalá, 3 de diciembre de 1998

TEMERARIO CORTÉS