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ISSN: 1575-2844

Revista Vivat Academia

 Histórico Año IV

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Julio - Agosto 2002. Nº 37

Página dedicada a los artículos y las noticias relacionados más directamente con la Universidad de Alcalá.

Situación de los Servicios Informáticos (Vladimiro Fernández Tovar)
¿Qué será, será? (Julio Gutiérrez)

Situación de los Servicios Informáticos

Vladimiro Fernández Tovar

El Consejo de Representantes del PAS ha acordado dar difusión, para conocimiento de toda la comunidad universitaria, a un escrito de denuncia de la situación de los Servicios Informáticos y que están padeciendo los trabajadores adscritos a dicho servicio. Este escrito fue redactado por los propios trabajadores, viene avalado por la firma de 21 de ellos, y fue entregado a este Consejo el 28 de mayo. Las firmas no se dieron a conocer ante el temor de los trabajadores a posibles represalias y se encuentran en poder de este órgano.

Este escrito ha sido presentado ante la Junta de Gobierno (punto 11 de la sesión de 29 de mayo) por los representantes del PAS en dicho órgano.

En base a la información que en él se da, el Consejo de Representantes ha presentado escrito de denuncia a la Gerente, con copia al Rector.

Ante la falta de respuesta a este escrito por parte de la Gerente y del Rector, el Consejo de Representantes insiste en la necesidad de esclarecer los hechos denunciados, ya que, si bien la Junta de Gobierno ha acordado la creación de una Comisión y el encargo de una Auditoría, no tenemos conocimiento de que se haya tomado ninguna medida para la investigación de las presuntas faltas atribuidas al Director de los Servicios Informáticos.

Finalmente señalar que el Consejo de Representantes seguirá emprendiendo cuantas acciones sean necesarias hasta llegar a una solución del problema.

Alcalá de Henares, 5 de julio de 2002

El presidente del Consejo de Representantes
Vladimiro Fernández Tovar

SITUACIÓN DE LOS SERVICIOS INFORMÁTICOS

Escrito de los trabajadores adscritos

El estado actual de los Servicios Informáticos (SSII en adelante) se ha degradado en los últimos tiempos, y los problemas existentes se han visto agravados por:

un claro deterioro del ambiente de trabajo,
pérdida de confianza en la labor realizada por el personal del Servicio e
inestabilidad laboral de parte de su plantilla.

Memoria histórica

Desde hace varios años la Universidad de Alcalá viene sufriendo una carencia progresiva de respuesta eficaz en muchos temas relacionados con la informática. No es fácil encontrar algún colectivo satisfecho con las herramientas y condiciones de uso de los elementos informáticos empleados.

Es cierto que al estar presente nuestro trabajo en prácticamente todas las áreas de actuación de la Universidad, es normal estar en boca de todos, pero no es normal que casi nadie esté mínimamente satisfecho, a juzgar por los resultados de la encuesta de Clima Laboral.

En los últimos años la máxima responsabilidad de los SSII ha pasado por varias y muy distintas personas. En este tiempo, estos responsables han modificado la estructura del personal existente, han aumentado o disminuido exageradamente el número de becarios, han realizado o extinguido contratos, han abordado una funcionarización de personal laboral y han subcontratado en mayor o menor medida servicios a empresas externas.

Esta subcontratación no ha ido acompañada de un control de calidad sobre los programas que suministran las empresas o el servicio que prestan. En cambio, sí ha existido un importante aumento del coste real, al que hay que sumar el importantísimo "coste oculto" en el trabajo interno de los Servicios y sobre todo las consecuencias que han sufrido el resto de los usuarios de la comunidad universitaria.

Cabe destacar el pésimo servicio prestado por las empresas (dos en dos años) que realizan o han realizado el mantenimiento de la microinformática, siendo significativo que determinados responsables de la Universidad recurran directamente al personal de los SSII para solucionar sus incidencias. El hecho de que se repitiera la experiencia, asumiendo además otras funciones propias de los trabajadores, sorprende en mayor medida cuando la propia Gerencia, en diciembre de 2000, dijo que se trataba de una situación "reversible", en la medida en que si no funcionaba, los SSII asumirían de nuevo su función.

A pesar de esto no ha habido pudor en acusar a los trabajadores de boicotear dichos servicios, cuando en realidad poco o nada tienen que ver, consolidando una campaña de desprestigio hacia los mismos.

Degradación del ambiente de trabajo

Entre los distintos Directores, el actual ha dado un paso cualitativo y cuantitativo atacando a su propio personal, condenando a un permanente conflicto cualquier relación de trabajo interna o externa en los Servicios.

Las continuas acusaciones por parte del Director, así como la voluntad de éste de paralizar o dificultar las tareas rutinarias o extraordinarias que se realizan habitualmente han generado un ambiente de tensión y creciente malestar, tal vez con el objetivo de justificar las continuas críticas a sus propios trabajadores o justificar la necesidad de intervenciones externas a la Universidad.

En los últimos meses, se está viviendo un auténtico acoso laboral colectivo y un desprecio hacia la labor de los trabajadores con manifestaciones insidiosas y acusaciones directas o indirectas. Este Director, además, está realizando una creciente contaminación en la opinión de otros responsables de la Gerencia cuyo efecto es ocultar las carencias en la dirección y planificación informática a cualquier plazo.

Muchos hechos lograrían ilustrar este comportamiento, aunque podrían destacarse los siguientes puntos:

Mentiras a la comunidad universitaria respecto al hacker, acusando directamente a trabajadores de los Servicios Informáticos, según declaraciones ante el propio personal y a personas ajenas al servicio. Ver declaraciones en prensa.
Desconocimiento, por parte del director, de las funciones de cada trabajador, así como confusión sostenida en las funciones que cada área realiza, a pesar de los controles absurdos y obsesivos de las tareas realizadas por cada persona.
Desconfianza hacia el personal: acusando de provocar los fallos cuando éstos suceden, corroborando explicaciones o tratando de buscar incoherencias entre versiones de los propios trabajadores.
Aislamiento del personal en sus funciones: en unos casos se comunica al trabajador que no haga determinadas tareas; en otras saltándose a los mandos intermedios; y en ocasiones dejando de convocar a reuniones a determinadas personas, que deberían estar según los temas tratados.
Amenazas al personal sobre sus condiciones de trabajo.
Falta de comunicación de tareas urgentes que proceden de otros servicios de la Universidad, retrasándolas o impidiendo el buen funcionamiento del servicio.
Falta de comunicación con los empleados, argumentando que no tiene tiempo.
Ausencia de cursos específicos de formación, o impidiendo la asistencia a los mismos. Esta situación se traduce en que sistemáticamente personal informático queda totalmente fuera de todo curso de formación informática.
Ausencia de reuniones generales. Únicamente ha habido dos reuniones con todo el personal: una en mayo de 2001 en la que únicamente se preguntó: "¿Quiere alguien decir algo?" para después dar por terminada la misma. La otra en Navidad para felicitar al personal, justo después de hacer lo mismo con los becarios para decirles inmediatamente después que no hacía falta que vinieran al día siguiente.
Eliminación de las reuniones entre áreas que permiten un lógico y necesario intercambio de información.
Ausencia de decisiones propias de la Dirección descargando en los trabajadores esa tarea.
Prohibición de la entrada en horas fuera del horario habitual, dando instrucciones a los vigilantes para que impidan el acceso al personal, incluso cuando se trata de motivos urgentes o problemas graves.
Dejadez sostenida en la seguridad del edificio que ha provocado que este se encuentre abierto durante los fines de semana, mientras que los propios trabajadores tiene que registrar su paso por cada uno de los despachos.
Dejadez sostenida en la seguridad de las personas, lo que ha provocado varios accidentes.
Ausencia de un responsable-administrador del edificio, así como la falta de conserje.
Seguridad: se han venido produciendo actuaciones de empresas externas en los Servicios Informáticos. Este director negó la realización de dichas tareas a los propios trabajadores, impidiendo las paradas del servicio necesarias para la instalación de un sistema de seguridad (firewall), mientras que sí se le consintió dicha parada a una empresa externa. Inmediatamente, aparecieron deficiencias sufridas por los usuarios durante varios días, que deberían haber sido resueltas por la empresa y que, finalmente, tuvieron que ser solucionadas por los trabajadores del servicio. De dichas actuaciones externas se desconocen los procedimientos de control seguidos.
Visitas a congresos o reuniones técnicas a las que asisten variado personal informático de empresas y Universidades y a las que únicamente asiste el Director con una nula información posterior sobre los temas de interés tratados. Más grave es todavía que, tras anunciar la realización de una auditoria de seguridad, los propios trabajadores desconozcan los resultados de ésta y por tanto no puedan tomar las medidas necesarias.
Comentarios impropios de un Director, que provocan malentendidos.

Inestabilidad laboral

El 23 de diciembre de 1999 se comunicó al personal laboral temporal de los SSII la rescisión de sus contratos, al entrar en vigor la RPT de puestos funcionarios.

Posteriormente, se firmó un nuevo contrato, en el que se les contrataba como personal laboral temporal, adscritos a las plazas de la RPT. Se acordó también, según reunión con la Gerente y el director de los Servicios Informáticos, que en un plazo máximo de dos años, 15 de las plazas contempladas en la RPT se cubrirían mediante un concurso-oposición, de tal forma que el personal laboral tuviese la oportunidad de acceder libremente a dichos puestos. La realidad es que a fecha de hoy, no se ha realizado ningún concurso-oposición.

Se nos presentan argumentos de necesidad urgente de personal como justificación para cubrir rápidamente determinadas plazas, pero esta necesidad no se manifiesta en acciones como la no renovación de las becas (que supuso la brusca disminución de nueve colaboradores en este Servicio) o el retraso sostenido de los procesos anunciados para estabilizar la situación laboral: promoción y concurso-oposición libre. Mientras tanto, el personal laboral permanece en vilo cuando se deshacen y rehacen sus contratos, se contrata a empresas privadas y se minoran sus oportunidades cubriendo plazas con concursos externos y comisiones de servicio. Todas estas acciones no parecen mejorar la calidad del servicio, pero desde luego provocan una permanente incertidumbre de todos los trabajadores sobre los objetivos y los planes de futuro.

Además, la provisión no ha resultado del todo efectiva, ya que el perfil publicado para ellas no se ajusta al trabajo que luego se realiza en ellas y además se eliminaron nueve becas de un día para otro, antes de cubrirse ninguna de ellas.

A pesar de que el sistema de becarios no sea el más adecuado, sí que ayudaban a la realización de las tareas habituales, la falta de planificación de esta situación afectó a las distintas áreas en las que prestaban colaboración, (la decisión de no convocar o renovar las becas no se supo hasta el último día del año).

También, y sin que se haya dado demasiada o ninguna publicidad (salvo en el BOCM), tal vez por el período preelectoral en que nos encontramos, se ha realizado un proceso para cubrir dos plazas de Jefatura de Servicio de libre designación, "consolidando" de esta manera una comisión de servicios en una de ellas, dando la impresión de que se pretende perpetuar esta caótica situación cubriendo convenientemente las plazas de más responsabilidad.

Por tanto, parece que haya una clara intención de ir trayendo y consolidando trabajadores externos a la Universidad, sin una previa estabilización de los ya existentes.

Conclusiones

El actual Director se ha escudado en el desconocimiento que se tiene en la Universidad de la situación secular y real de los SSII para culpar a sus trabajadores, acusándoles de falta de interés, conocimientos o directamente premeditación o boicot en algunas acciones (Nada más lejos de la realidad). Por otra parte, es conocida su decisión de marcharse. (sic. Quizá no quiera permanecer aquí cuando se hundan los Servicios Informáticos).

El trabajo se desarrolla en una situación en permanente conflicto, con una pésima valoración por parte de otros servicios y un nulo reconocimiento del esfuerzo realizado día a día, tratando a los trabajadores, en algunas ocasiones, incluso como delincuentes.

¿Por qué con tantos cambios de Director y cambios en la estructura interna, sigue manteniéndose la situación año tras año? ¿A quién favorece este estado?

Sencillamente por falta de planificación. Se ignora qué hacer con la informática y cómo debe dar respuesta a los variados temas en los que es herramienta.

Toda esta falta de horizonte se ha traducido en una pésima respuesta del Servicio al resto de la Universidad, en la situación interna descrita anteriormente, y en una falta de expectativas profesionales donde personal contratado, algunos trabajando en la Universidad desde hace más de diez años, tiene unas mínimas perspectivas de estabilización. Estos trabajadores han venido sufriendo sucesivos ataques a su labor profesional con continuos cambios de contrato.

Por último, aunque triste, hay que recordar que estas denuncias realizadas por la mayoría del personal de los Servicios Informáticos, ya se han hecho hace años con una nula respuesta por parte de los máximos responsables de la Universidad. Se extraen aquí algunos párrafos de un escrito fechado en noviembre de 1999, ahora hace dos años y medio:

...

"Sin embargo, podríamos llegar a una conclusión sin temor a equivocarnos, y ésta es que en ningún momento ha existido por parte de los gestores universitarios un modelo claro de los SSII necesarios para una Institución dedicada a la docencia y la investigación. Así mismo, tampoco se ha desarrollado una mínima planificación ni se han establecido unos objetivos básicos a medio o largo plazo.

...

Todo lo expuesto hasta ahora nos hace sospechar que esa falta de modelo y planificación en lo referente a la informática de la Universidad sea una política premeditada para la justificación de cualquier medida de privatización del Servicio.

...

Todas estas circunstancias, sin embargo, aunque criticables en cualquier caso, podrían ser justificadas por el Rector y sus gestores si el servicio que recibe la Comunidad Universitaria fuese mínimamente satisfactorio, pero no lo es, por más que reiterada y constantemente se afirme por quienes sostienen y apoyan esta situación.

Son por el contrario, los usuarios de estas aplicaciones informáticas, es decir, los trabajadores de la Universidad, los que realmente sufren sus carencias y deficiencias, que en la mayor parte de las ocasiones se solventan gracias al esfuerzo y dedicación de los mismos, sin que nadie valore ese esfuerzo, puesto que por parte de los responsables de la gestión se elude voluntariamente la existencia de los problemas informáticos.

...

A su vez, en muchas ocasiones todos estos problemas se hacen recaer sobre el personal de los SSII de la Universidad a los que, en su mayor parte, no se les tiene en cuenta a la hora de adoptar decisiones de cierta trascendencia y que les vienen impuestas no se sabe muy bien desde dónde (o quizás sí), y ante las cuales después tienen que dar la cara cuando se producen los problemas."

El presente escrito pretende que la Comunidad Universitaria tenga en cuenta a unos trabajadores que únicamente quieren que su trabajo responda a las expectativas que el resto de la Universidad deposita en ellos y que no tienen otra forma de defender sus condiciones de trabajo.

Se trata de una llamada a la solución de los múltiples problemas que se han visto agravados en los últimos meses, y que emanan de los Servicios Informáticos, ante la actual Gerencia y equipo Rectoral o ante cualquier otro próximo equipo de gobierno, y una llamada a la crucial importancia en la elección del Director de los Servicios que, teniendo como principal función la de desarrollar la Informática en la Universidad, puede empeorar y distorsionar los problemas existentes, como está ocurriendo con el actual.

Alcalá de Henares, a 28 de mayo de 2002

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¿Qué será, será?

Julio Gutiérrez. Universidad de Alcalá de Henares.

Han acabado las obras de la rotonda de Ciencias, ¡al fin! Pero, como es habitual en la UAH, con sorpresa incluida. En el centro de la misma, han aparecido una mañana dos pedruscos misteriosos de tamaño grande uno y pequeño el otro, que nos tienen intrigrados.

¿Qué representarán?

Los más optimistas hablan de una semblanza de D. Quijote y Sancho. Los peor intencionados comentan la posibilidad de una dedicatoria al rector saliente y alguno de sus vicerrectores. La solución quizás se la podamos dar en el próximo número de esta revista.

Pero lo más asombroso ha sido el escalón del enlace entre el empedrado de la vía y el asfaltado del puente sobre el ferrocarril, obsequio del vicerrector de Infraestructuras. Tamaño colosal, sin indicaciones, de un color grisáceo perfectamente camuflado en su entorno, sin posibilidades de atisbarlo. Produce, la primera vez que se pasa por el acceso, aunque se circule a 10 km/hora, un miedo terrible a haber reventado los amortiguadores. La segunda vez ya viene uno provisto de un par de tablones en el maletero, para poderlos utilizar como rampa, evitando posibles rechazos del vehículo en la siguiente ITV.

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Vivat Academia, revista del "Grupo de Reflexión de la Universidad de Alcalá" (GRUA).
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