Ilusiones ópticasSigfrido del Alce ¿Qué ve en la imagen? ¿Círculos concéntricos o una espiral continua? Si se fija bien, verá que son círculos. Volver al principio de ilusiones ópticas Volver al principioAutotransformantesFuenteovejuna Volver al principio de autotransformantes Volver al principioNuestros amigos los animales"El Grillo" Volver al principio de "nuestros amigos" Volver al principioCamisetas curiosasSigfrido del Alce Volver al principio de "camisetas curiosas" Volver al principioJulian Beever y sus dibujos en la aceraVolver al principio de "dibujos en la acera" Volver al principioAccidentes espectacularesFuenteovejuna Por error, en la edición de diciembre 2006/enero 2007, repetimos la misma imagen que había aparecido en el número 76, correspondiente a marzo de 2006. Por ello, en esta ocasión, les ofrecemos dos imágenes, rogándoles disculpen nuestro olvido. Volver al principio de "accidentes" Volver al principioCosas de los anglosajonesFuenteovejuna Un gran libroComentario de una mujer: Nunca nos comprenderán, ellos están a años luz de nosotras. ¿Recordáis el libro "Los hombres son de Marte, las mujeres de Venus"? Un profesor de lengua inglesa que trabaja en una universidad americana nos ofrece este excelente ejemplo. Profesor: - Hoy vamos a experimentar con una nueva forma llamada "historia en tándem". El proceso es simple. Cada persona se emparejará con la persona que se sienta a su lado. Uno de ellos escribirá entonces el primer párrafo de una historia corta. Su compañero leerá ese primer párrafo y añadirá un segundo párrafo a la historia. Después, la primera persona añadirá el tercer párrafo, y así sucesivamente. Recordad, releed lo que se ha escrito cada vez, para mantener la coherencia de la historia. Está absolutamente prohibido hablar; la única comunicación entre ambos miembros de la pareja la constituye lo que hay escrito en el papel. La historia termina cuando ambos estén de acuerdo en que lo ha hecho. Esto que sigue lo presentaron dos alumnos, Rebecca y Gary (no vamos a dar sus apellidos). HISTORIA: Primer párrafo, por Rebecca: Al principio, Laurie no podía decidir qué tipo de té quería. La camomila, que solía ser su favorita para las perezosas tardes en casa, ahora le recordaba demasiado a Carl, quien, una vez, en tiempos mejores, dijo que le gustaba la camomila. Pero necesitaba mantener a Carl fuera de su mente a toda costa. Su posesividad era sofocante y, si pensaba demasiado en él, volvía a tener ataques de asma. Así que la camomila quedaba descartada. Segundo párrafo, por Gary: Mientras tanto, el sargento Carl Harris, jefe del escuadrón de ataque en órbita sobre Skylon 4, tenía cosas más importantes en que pensar que las neuras de una cabeza hueca asmática con la que había pasado una sudorosa noche hacía más de un año. - Sargento Harris a Geoestación 17 -dijo en su comunicador transgaláctico-. Órbita polar establecida. Por el momento, sin signos de resistencia... Pero antes de que pudiera cortar, un rayo de partículas azulado surgió de la nada, haciendo un agujero en la bodega de su nave. La sacudida causada por el impacto le proyectó a través de la cabina. Rebecca: Se golpeó en la cabeza y murió casi instantáneamente, no sin antes sentir un último remordimiento por haber tratado tan mal a la única mujer que había sentido algo por él. Poco más tarde, la Tierra cesó sus fútiles hostilidades contra los pacíficos granjeros de Skylon 4. "El Congreso ha aprobado una ley para abolir permanentemente la guerra y los viajes espaciales", leyó Laurie una mañana en el periódico. La noticia la estimuló y aburrió a un tiempo. Miró por la ventana, soñando con su juventud, cuando los días pasaban lentos y despreocupados, sin periódicos que leer, ni televisión que la distrajera de esa sensación de asombro inocente ante todas las maravillas que descubría a su alrededor. "¿Por qué hemos de perder nuestra inocencia para convertirnos en mujeres?", se preguntó melancólicamente. Gary: No sospechaba que le quedaban menos de 10 segundos de vida. A miles de kilómetros sobre la ciudad, la nave nodriza Anu'udriana lanzó el primero de sus misiles de fusión de litio. Los estúpidos pacifistas que hicieron que el Congreso aprobara el Tratado Unilateral de Desarme Aeroespacial habían convertido la Tierra en un blanco indefenso para los imperios hostiles alienígenas que habían determinado destruir la raza humana. Dos horas después de la aprobación del tratado, las naves Anu'udrianas se dirigían a la Tierra con suficiente armamento para pulverizar el planeta entero. Sin nadie que les detuviera, iniciaron de inmediato su diabólico plan. El misil de fusión de litio entró en la atmósfera sin oposición. El Presidente, en su cuartel general secreto submarino junto a la costa de Guam, sintió la tremenda explosión que desintegró a la pobre tonta de Laurie, junto con otros 85 millones de americanos. El Presidente dio un puñetazo en la mesa de conferencias... Rebecca: Esto es absurdo. Me niego a continuar este simulacro de literatura. Mi compañero de escritura es un adolescente semi-analfabeto, violento y chauvinista. Gary: ¿Ah, sí? Pues tú eres una neurótica aburrida y ególatra, cuyos intentos de escritura son el equivalente literario del Valium: "¡Oh! ¿Me tomaré un té de camomila? ¿O debería tomarme algún otro PUTO TÉ? ¡Oh!, no, sólo soy una descerebrada que ha leído demasiadas novelas de Danielle Steele." Rebecca: Gilipollas. Gary: Zorra. Rebecca: ¡Cabrón! Gary: Guarra. Rebecca: ¡Que te den por el culo, Neanderthal! Gary: Anda y tómate un té, puta. Profesor: - La nota es 10. Me ha encantado. Volver al principio de cosas de los anglosajones Volver al principio |
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