¿Y el pancarterismo de género?José Carlos Navarro Muñoz. Mérida (Badajoz) No hay diferencias regionales en la transversal violencia doméstica, esta vez ocurrida en Toledo, con todos sus componentes asesinados y el agresor suicidado: mujer, madre, hijo y el intento a sus otras dos hijas en lugar diferente del crímen. Esta brutal masacre debería ser el punto de inflexión del fracaso de una ley que fue bendecida por todos los partidos políticos, especialmente por el partido socialista que la legisló y las asociaciones feministas que antaño inundaban las calles protestando contra el anterior gobierno. Incluso llegaron a manifestarse contra el CGPJ por sus objeciones de constitucionalidad, dejando tantas rosas rojas en la puerta de la institución como número de mujeres asesinadas por sus parejas. Ahora hay otro gobierno y las manifestaciones de protesta contra él ya no se suceden, incrementándose las víctimas. Una ley calificada por juristas y muchos padres afectados como sexista y discriminatoria, se ha demostrado ineficaz ante ejemplos cuya brutalidad manifiesta se ha expresado ahora en Toledo. ¿Dónde está ahora el pancarterismo de género protestando al gobierno por estas muertes?. Es triste que estas desgracias familiares sean vistas desde puntos de vista ideológicos y de partido, que impidan ver la realidad del fenómeno desde los vicios ocultos de la sociedad y del sistema. El edificio familiar se sustenta con cimientos y pilares debilitados con vicios estructurales, que estallan en algunos casos con trágicos desenlaces, sin que ya la ley pueda llegar. Denunciar es la irreversibilidad de la integración familiar, por mucho incremento que se realice: la Comunidad de Madrid, más de 18.000 anuales, aumentó el 35% y 1.500 condenados a cárcel. La ley no funciona a pesar de los medios y financiación que dicen se necesitan. Ya se han hecho multitudinarias manifestaciones en favor de la familia en esta legislatura, no sería mala idea una convocatoria para solucionar esta lacra mediante la perspectivas de base familiar, orientación, prevención y corrección. Es evidente que quien termina suicidándose no hay ley penal que le vaya a impedir finalmente su propósito. Volver al principio del artículo Volver al principioSoy funcionario pero me estoy reciclandoRoberto Afonso Concepción. Estoy haciendo un curso para ser soportable. Sí, estoy ya cansado de ser un gruñón inaguantable que se queja por las cosas más insignificantes, como por ejemplo soportar (el verbo no está elegido al azar) durante cuatro años al frente de una biblioteca sin libros, en el barrio más marginal de una capital de provincia ultra periférica, y, además manteniendo siempre una sonrisa en mi cara cuando, día tras día, los mismos usuarios hartos de la vida me preguntaban cuándo llegarían los libros... Ahora ya no resisto los ataques de delincuentes varios ni el tedio más atroz ni, sobre todo, la incompetencia del concejal de turno (generalmente un niño pijo insoportable elegido, por su brillante linaje, para ser incluido en la lista electoral del mismo alcalde cacique de toda la vida), que siempre respondía a mis requerimientos con un lacónico para qué quiere esa gente libros. Ahora he sido premiado con un traslado al centro de inteligencia de la administración pública local, tras docenas de peticiones caídas en saco roto y de meses de baja laboral por ansiedad. Ahora encajo las críticas de mis nuevos compañeros con la mejor buena voluntad del mundo, como el que oye a un niño mimado gordo berrear, por enésima vez, al negársele la vigésimo cuarta chuche del día. Al fin y al cabo, ellos no tienen la culpa de que se les haya consentido ni de que se crean con derecho a inmiscuirse en las intimidades de toda la plantilla, porque como su plaza es fija... Sí, creo que ellos tienen razón, soy un tirano y un ser absolutamente déspota que pretende someter al resto de los compañeros a un control férreo de su trabajo, llegando incluso a acosarles y a coartar su libertad personal. Sí, es verdad que les sugerí que podríamos acortar la media horita del desayuno (en realidad hasta casi dos horas en algunos casos) para poder acabar a tiempo el proyecto que nos ocupa desde hace meses y que llevamos postergando, incluso desde antes de empezar a trabajar en él. No pretendo hacer creer a nadie que yo sea un trabajador modelo ni una compilación de cualidades humanas extraordinarias. La verdad es que no lo soy, gracias a Dios, porque si eso supone ser un pusilánime que finge delante de una pantalla de ordenador que trabaja arduamente, cuando en realidad lo que hace es ver mensajes electrónicos tronchantes, reenviados miles de veces por elementos similares, pues prefiero no aglutinar virtudes a destajo, francamente. La vida de un funcionario es dura, eso siempre lo he sabido, nunca exenta de estrés y de riesgos que te llevan al borde de un infarto de miocardio o de un ictus apopléjico en cualquier momento (no olvidemos que hay que esquivar durante toda la jornada todo tipo de dagas voladoras que son lanzadas en cuanto te das la vuelta o que, a veces, hay que trabajar hasta dos horas seguidas...). Pero me gustan los retos y la aventura, por eso estoy haciendo este curso de reciclaje para ser soportable, para poder tolerar este ritmo frenético de este centro de alto rendimiento y ser un compañero ejemplar, un sujeto despersonalizado en estado casi vegetativo, a ser posible con una lesión cerebral que le impida expresar opiniones y ser constructivo, y, sobre todo, carente de cualquier sentido de la solidaridad, de la amabilidad y de la empatía. Y creo que lo estoy consiguiendo, sólo hay que leer este texto para comprobarlo. Volver al principio del artículo Volver al principioCabrera vencerá pero no convenceráJosé Carlos Navarro Muñoz. Mérida (Badajoz) De error califica la ministra de Eduación y Ciencia, Mercedes Cabrera, el que la Iglesia Católica "no entendiera la importancia de una educación en valores ciudadanos y democráticos como los de Educación para la Ciudadanía". Por lo pronto es un craso error intentar tergiversar los informes del Consejo de Estado, que no están de acuerdo con tal adoctrinamiento en valores relativos, no incluidos en la Constitución, según nos aclaran Profesionales por la Ética. Vencerá con los votos de socialistas y radicales, pero sus explicaciones no convencen por mucha retórica que utilice. Si dice que no puede comprender que esto no forme parte de la formación de niños y jóvenes, lo que muchos padres no podemos comprender es que, desde un Estado Occidental del XXI, se pretenda adoctrinar a nuestros hijos. Menos aún en mentiras consensuadas por políticos electos surgidos por la conmoción de un brutal atentado. No se conforman con imponer una materia que adoctrina a los niños, también quieren la aprobación de la Iglesia y de los padres. Existen valores de muchísimos padres que quieren transmitir a sus hijos, como que el matrimonio es la unión entre hombre y mujer y el divorcio exprés es una aberración. Valores como el derecho a la vida desde la concepción hasta la muerte natural. Aquellos que consideran que el derecho de los niños -a tener padre y madre- es el primero por encima de la adopción por parejas del mismo sexo. Y un largo etcétera que hace afirmar que la ministra Cabrera, en principio, vencerá pero no convencerá. Al no convencer su asignatura está avocada al fracaso. Tratándose de niños viene bien recordar la frase de Graham Greene, "nunca convencerás a un ratón de que un gato negro trae buena suerte". El gato es la asignatura, nuestros hijos las indefensas cobayas o ratoncitos. Volver al principio del artículo Volver al principioEndogamia universitariaCamilo José Cela Conde Publicado en el Diario de Mallorca de 2 de marzo de 2007 No es, desde luego, el mayor problema que tiene planteado este país, ni tampoco el de mayor enjundia por lo que hace a la educación española, pero lo cierto es que abundan de un tiempo a esta parte las noticias acerca de la endogamia que se practica en nuestras universidades. El guión es muy parecido en todos los casos; se celebran oposiciones o concursos, los gana el candidato digamos "local" -el vinculado al departamento que saca a concurso la plaza-; otro de los participantes se siente discriminado, recurre a los tribunales de la Justicia y éstos le dan la razón. Para escándalo y vergüenza de la universidad que ha organizado el proceso de selección de los candidatos. Visto desde fuera, el caso no parece tener vuelta de hoja: se ha preferido, por razones que no tienen que ver con la valía personal ni el curriculum investigador y docente, a la persona peor sólo porque dispone de amigos en el departamento que la apoyan. Pero las cosas no son por desgracia tan sencillas. El problema de raíz, el que convierte en irresoluble todo el resto del procedimiento, es la condición funcionarial del profesorado universitario, disparate mayúsculo donde los haya. Imaginemos lo que sucedería si los equipos de fútbol se seleccionaran y organizasen por el mismo sistema: convocando oposiciones. Se podría dar el caso de que los veinte mejores candidatos fuesen todos porteros o que, incluso distribuyéndose en las distintas tareas del campo, el juego de unos y otros fuese incompatible entre sí. No se puede formar un equipo de fútbol por oposición pero tampoco un equipo de investigación y ni siquiera un departamento docente. Ese disparate, típico de España, es incomprensible en aquellos lugares que intentamos tomar como modelo, al estilo de las universidades estadounidenses. Cualquier institución docente o investigadora de élite de allí contratará mediante procedimientos de selección muy rigurosos al director del departamento o instituto que quiera montar, le marcará unos objetivos y luego le dejará las manos libres para que contrate al resto de los miembros del equipo que, a su juicio, pueden servir para alcanzar los objetivos fijados. Los procedimientos de selección de esos otros miembros del equipo serán mucho más rigurosos que los de nuestro funcionariado pero dirigidos desde arriba: buscando los candidatos a dedo e intentando contratarlos. Lo contrario -el sistema de la plaza fija para siempre a la que se accede mediante oposición- lleva al caos propio de los departamentos españoles, donde coinciden tantas supuestas prima donnas. Con el resultado de un gallinero en el que las aves terminan agrupadas en camarillas irreconciliables. Cuando no se da paso al acoso laboral, sin más, para desprenderse de alguien tenido por indeseable. La situación no mejorará, se haga lo que se haga con los procedimientos de la oposición, mientras ésta siga en pie y los profesores sean funcionarios asentados en su plaza para toda la vida, hagan lo que hagan. De hecho, es incomprensible que con un sistema tan inútil y perjudicial se logre buena docencia y buena investigación en las aulas. Sólo se explica porque hay profesores que se olvidan de sus privilegios funcionariales y actúan como si estuviesen en una institución -del extranjero, claro- sometidos al control del resultado de su trabajo. Volver al principio del artículo Volver al principioComunicado de agradecimiento al Grupo VocentoMaribel Martínez Eder. Portavoz de FIATYR. www.asociacionplazadelcastillo.org Queremos hacer llegar nuestro más expresivo agradecimiento al Grupo Vocento, por la eliminación de la publicidad pornográfica, esperemos que para siempre, del tv.semanal. Por primera vez desde hace años, en el nº 1010 del viernes 2 de Marzo de 2007, que se entrega gratuitamente con los rotativos correspondientes, no aparecen tales contenidos. En Diciembre de 2006, pusimos en conocimiento del Consejo Audiovisual de Navarra la situación, y divulgamos todos los pormenores, en un artículo disponible en nuestra página web titulado: "A la atención del Grupo Vocento", que ha dado sus frutos. En nombre de la Federación Ibérica de Asociaciones de Telespectadores y Radioyentes (FIATYR), y en el mío propio, gracias de nuevo. Volver al principio del comunicado Volver al principio"El gran timo del calentamiento global", emitido por Channel FourPublicado en "Libertad digital", 13 de marzo de 2006 Amenazan de muerte a científicos por participar en un documental escéptico con el calentamiento global El canal británico Channel Four ha emitido un documental llamado "El gran timo del calentamiento global", en el que varios expertos denuncian que una poderosa alianza de políticos, ecologistas y científicos que rechazan cualquier debate sobre la idea de que el hombre es el causante principal de ese calentamiento. Después de su emisión, varios de los científicos que participan en el documental han recibido amenazas de muerte y acoso profesional. La última cumbre del clima se inició desoyendo el debate científico. (Libertad Digital) El clima de la Tierra ha saltado de los minoritarios debates entre los científicos al campo de la política y de la discusión general por los medios de comunicación. Una parte de los científicos apoya el mensaje alarmista de políticos y ecologistas que afirman no sólo que hay un calentamiento que tendrá consecuencias catastróficas, sino que esa evolución de la temperatura de la Tierra es responsabilidad principalmente de la actividad humana. Pero esta posición no es la única que mantienen los científicos, ya que una parte importante de ellos considera que el hombre no es el mayor responsable del calentamiento, o que los efectos del aumento de la temperatura media no serán catastróficos. Al debate han contribuido dos documentales, uno firmado por Al Gore, y el otro, en el que contribuyen varios científicos, y que se titula significativamente El gran timo del calentamiento global. Cinco amenazas de muerte Mientras que el primero ha sido premiado con un Oscar, a pesar de que el propio Al Gore es un ejemplo extremo del comportamiento energético que él mismo critica, el recibimiento del otro documental ha sido muy distinto. El Sunday Telegraph explica, según ha destacado el blog Barcepundit, que tras la emisión en el Channel Four del documental se han producido cinco amenazas de muerte al climatólogo Timothy Ball. Uno de ellos le advertía de que si continúa con su postura, no vivirá para ver cómo se calienta el planeta. Ball ha declarado que "yo puedo tolerar que me llamen escéptico, ya que todos los científicos deberían ser escépticos; pero entonces empiezan a llamarnos revisionistas, con todas las connotaciones que tiene respecto del Holocausto. Esto es una obscenidad". Volver al principio del artículo Volver al principio |
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