Seis chistes malos, seis y una lección de lenguajeSigfrido del Alce Amor maternal Una niña le pregunta a su madre: - Mami, ¿De dónde salen los bebes? ¿Cómo nací yo? La madre le contesta: - Hija, un día fui al jardín, corté la flor más bonita, la puse en una cajita de cartón y la guardé en el joyero de mi cuarto. Esperé nueve meses, abrí el joyero y ahí estabas tú, mi hermosa hija. Y la niña le responde: - ¡Ah!, pues yo voy a hacer lo mismo porque quiero tener un bebé. Entonces, la niña se va al jardín, corta una flor y la guarda en una cajita. Al pasar los nueve meses, la niña se va a su cuarto, abre la caja y se encuentra una cucaracha. La niña la mira y, molesta, le dice: - Porque eres hija mía, pero me dan unas ganas de matarte... Lógica aplastante El primer día de clase, Pepito llegó a la escuela y, cuando el maestro le dijo: - Saca tu libro y tu cuaderno. Pepito le contestó: - No tengo porque mi mamá es muy pobre y no puede comprar ni cuadernos ni libros para ninguna de las materias. El profesor, molesto, le amonestó: - ¿Qué pensarías tú de un soldado que va a la guerra y no lleva nada con que defenderse? Y Pepito respondió: - ¡Que es hijo de mi mamá! Optimismo Había un tipo que era muy optimista, a todo le encontraba el lado bueno. Un día un amigo le dice: - ¡Fíjate qué desgracia! Ayer, llegó Juan a su casa, encontró a su mujer con un hombre, sacó la pistola, los mató a los dos y luego se suicidó. - ¡Qué bueno! -contesta el primero. - ¿Cómo que bueno? ¡Si es una tragedia! - Pues sí, pero, si hubiera llegado un día antes, el muerto hubiera sido yo. Uno de Jaimito Llega Jaimito de la escuela después de haber realizado los exámenes finales y el papá le pregunta: - A ver Jaimito, ¿cómo te fue en los exámenes? - Pues no sé muy bien, Papi, pero los maestros que me evaluaron eran muy religiosos. - ¿Por qué Jaimito? -Pregunta el papá. - Porque cuando corregían el examen exclamaban "¡Ay, Dios mío!", "¡Virgen Santísima!", "¡Madre de Dios!" Cirugía moderna Estaban Juan y Pedro trabajando de leñadores, cuando de pronto Juan se cortó un brazo. Rápidamente Pedro metió en una bolsa de plástico el brazo de Juan y lo llevó al hospital. Al siguiente día, Pedro fue a ver a Juan y lo encontró jugando al tenis. Pedro dijo: - ¡Vaya, qué avanzada es la cirugía de hoy! Después de unos días, Juan se reincorporó al trabajo, pero era muy torpe y se cortó una pierna. De nuevo Pedro metió en una bolsa de plástico la pierna de Juan y lo llevó al hospital. Al siguiente día, Pedro lo fue a visitar y lo encontró jugando fútbol, y Pedro dijo: - ¡No cabe duda de que la medicina actual es excelente! Cuando Juan se reincorporó al trabajo, volvió a hacer alarde de su torpeza y se cortó la cabeza. Rápidamente Pedro tomó la cabeza de Juan, la metió en una bolsa de plástico y lo llevó al hospital. Al siguiente día Pedro fue a visitar a Juan, pero no lo encontró en parte alguna. Pedro le preguntó a una enfermera dónde estaba su amigo Juan y ella le contestó: - Lo hemos enterrado hoy. Pedro añadió: - ¿Y no han podido hacer nada, con lo avanzada que está la cirugía actual? Y la enfermera respondió: - ¡Se hubiera salvado de no ser por un idiota que le metió la cabeza en una bolsa de plástico y se asfixió! En la funeraria... - ¿Qué quiere que le hagamos a su suegra? ¿Incinerarla o enterrarla? - ¡Las dos cosas! ¡No corramos riesgos! Lección de lenguajeEl poder de la ubicación de la coma. Lea y analice la siguiente frase que carece de una coma: "Si el hombre supiera realmente el valor que tiene la mujer andaría a cuatro patas en su búsqueda". Si usted es mujer, con toda seguridad colocaría la coma después de la palabra mujer. Si usted es hombre, con toda seguridad colocaría la coma después de la palabra tiene. Volver al principio |
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