Docencia e Investigación
Arriba Último Nro. Índice Nros. Anteriores Índices Históricos

ISSN: 1575-2844

Revista Vivat Academia

 Histórico Año III

linea.gif (922 bytes)

Septiembre 2001. Nº 28

Contenido de esta sección:

La Fiesta (Benjamín Hernández Blázquez)
Concepto
Tipos de Fiesta
Carácter Antropológico de la Fiesta
Evolución cronológica de las Fiestas
Fotografía infrarroja con cámaras digitales (Luis Monje Arenas)
Genoma Humano y Clonación (Nicolás Jouve de la Barreda y Gabriel Gerez Kraemer)
RECORTES
Los expertos alertan de la ‘desastrosa’ formación científica en secundaria

LA FIESTA

Benjamín Hernández Blázquez

"La fiesta es una de las formas elementales de la vida colectiva, la expresión significativa de una solidaridad mecánica" (Durkheim).

Concepto
Tipos de Fiesta
Carácter Antropológico de la Fiesta
Evolución cronológica de las Fiestas

CONCEPTO: Proviene del latín festa, emparentado con feria, con el sentido de alegría y regocijo. De la misma raíz son festín, festivo y festival entre otras muchas; según Corominas, se documenta en castellano a principios del siglo XIII. En casi todos los idiomas modernos europeos, su grafía y contenido semántico apenas ha sufrido variación.

El Diccionario de la Lengua Española describe sus definiciones, todas con idéntico significado al referido, pero a lo largo del tiempo han dado lugar a múltiples expresiones como: Fiesta de guardar, fiesta de consejo, de precepto, de cabañuelas, reales, de armas, nacional, etc.; asimismo se han conformado acepciones, como celebrar las fiestas, santificar las fiestas, aguar la fiesta o tengamos la fiesta en paz..

De cualquier forma, la fiesta está anclada en el deseo humano de romper con las normas cotidianas, y su dimensión social susceptible de encajar en cualquier colectivo. Se puede considerar como la agregación de acciones de un grupo que adquiere forma exterior en tradiciones, costumbres y ceremonias, caracterizadas todas ellas por un elevado nivel de aceptación participativa. En la fiesta, consecuentemente, se transmiten numerosos significados: social, político, religioso... en los que la diversión desenfrenada e incluso orgiástica converge y se mezcla con la religiosa para, en simbiosis, cumplir diversas funciones como son la solidaridad y cohesión. Al respecto el etnólogo Luis Maldonado glosó que, "no existe verdadera festividad sin apertura a lo religioso, como no hay religiosidad sin una explosión a lo festivo".

Volver al principio del artículo             Volver al principio

TIPOS DE FIESTA: Resulta arduo establecer una clasificación de las numerosas fiestas españolas; tal vez el contenido del concepto podría ayudar a tipificar sus apartados; pero en cualquier caso siempre hay alguna fiesta que se escabulle a toda posible tipificación. Así lo entienden los estudiosos del tema, Caro Baroja los divide de acuerdo con las estaciones astronómicas: fiestas de invierno, de primavera y fiestas de verano y otoño. Otros sociólogos y etnólogos buscan los motivos principales que deben tenerse en cuenta (G. Atienza): según el instante iniciático, según los tiempos propicios, según la memoria que se conserva....

Este tema tan abierto y complejo precisa tener en cuenta que la distribución de las fiestas como cualquiera otra de la sociedad, dista mucho de ser uniforme ya que, entre el solsticio de verano y el doce de octubre, más del 80% de los municipios españoles celebran fiestas patronales siendo relevante la casi ausencia total, en meses como diciembre y febrero. Teniendo en cuenta lo expuesto, las fiestas pueden clasificarse en:

A) Fiestas sociales: Son las patronales, ya sean religiosas o profanas, y las conmemorativas

B) Fiestas de la naturaleza: agrícolas, estacionales y mitológicas

C) Fiestas familiares y locales de menor trascendencia, pero genuinas y específicas de cada lugar, e irrepetibles fuera de su contexto

Volver al principio del artículo             Volver al principio

CARÁCTER ANTROPOLÓGICO DE LA FIESTA: Básicamente dos rasgos configuran, en este sentido, la fiesta: 1) ruptura con lo cotidiano, es decir, hábitos, organización social y tabúes; 2) la liberación explosiva de los instintos, aspiraciones y sentimientos. La idea de ruptura, de conculcación de normas es indisociable de la fiesta, Freud decía: "la fiesta es un exceso tolerado e incluso ordenado", "es la violación solemne de una prohibición". En este sentido implica la anulación momentánea del tiempo social que regula la vida del grupo y de ahí que posea un tiempo propio, un tiempo místico e intemporal, el tiempo de la libertad creadora.

Destacan, asimismo, los antropólogos que el desorden transgresor y la exaltación lúdica y diomisiaca, alcanza su cota mas alta en las sociedades primitivas. Como contrapartida, señalan la degradación de las fiestas en las sociedades industriales y consumistas. En este tipo de sociedades se integran todas las manifestaciones de la vida colectiva en un circuito de producción/consumo y se deterioran las relaciones interpersonales así como la potenciación de los instintos individuales de posesión y ostentación. Y, si a veces se habla de civilización del ocio, también en ella la fiesta queda inscrita en una organización y comercialización del tiempo libre que la priva de sus valores propios.

El tiempo libre, por definición, debería ser el tiempo de libre elección y sin consejeros de ningún tipo. Es o puede ser, una revolución; una gran transformación humana se inició cuando los hombres empezaron a luchar no solamente por salarios en dinero, sino por salarios en tiempo. Extrapolando hacia la fiesta, se habla en este sentido de la pérdida del sentido de lo gratuito y de la capacidad de comunicar con otros. En estas coordenadas, tiende a ser tan sólo la ocasión del consumo en solitario, de uno u otro espectáculo, en el que uno no es actor ni compromete su propia intimidad, en vez de implicar una auténtica comunión con los otros, es decir, una espontánea participación en lo colectivo. Y ni siquiera la escasez de formas bajo las que parece sobrevivir esa imagen de la fiesta colectiva, se escurre de la dinámica sociedad de consumo, que las organiza y comercializa de acuerdo con su previsible rentabilidad.

Volver al principio del artículo             Volver al principio

EVOLUCIÓN CRONOLÓGICA DE LAS FIESTAS: La sociedad española tuvo siempre un gran sentido de la alegría que supo plasmar en numerosos festejos, religiosos y profanos; y en ocasiones una y otra cosa juntas, con los que generó un calendario lúcido a lo largo de todo el año.

Actualmente existen en el mundo varias decenas de calendarios que miden el tiempo a la vez que organizan las fiestas de modo distinto; pero casi todos recopilan, además del santoral, las efemérides y datos civiles diversos. El calendario sirve para distribuir el tiempo de trabajo y de ocio y, aquí las fiestas se sincronizan de acuerdo con un ciclo anual formando un sistema continuo de ordenación cronológica.

Aunque los calendarios maya, egipcio, musulmán ... tendían a ser herméticos, por sus poros han salido influencias que cristalizaron en fiestas del mundo occidental, y también en sentido sincrético que hace que muchas fiestas mezclen elementos procedentes del ciclo lunar y solar confundiéndose el año litúrgico con el ciclo agrícola, como aconteció con los celtas y romanos.

Por esta serie de eventos causales, las fiestas del solar español han pasado por diversos hitos o eslabones. Cuando Augusto se inició como emperador en Roma, el recién nacido calendario juliano tenía 76 días festivos, pero cinco siglos después, próximos a la caída del imperio, la depravada sociedad romana llegó a contabilizar hasta 171 fiestas entre circo, juegos, ferias...

Con la llegada del cristianismo, se dedicó el primer día de la semana al culto divino, era el "dies dominica" o día del señor; como fiestas anuales se instauraron la Pascua y Pentecostés, ambas de raigambre judía. La primera conmemoraba el hecho fundamental, la muerte y resurrección de la esencia del cristianismo, y Pentecostés evocaba la venida del Espíritu Santo sobre los apóstoles. Ambas fiestas son de origen apostólico y durante algún tiempo, fueron las únicas celebradas por los cristianos. La tercera que se añadió fue la Epifanía o manifestación del Señor a los gentiles, que figuró antes en las iglesias orientales.

Polémica fue la festividad de la Pascua que era distinta para las iglesias de oriente, por lo que el sínodo de Arlés y posteriormente el concilio de Nicea, año 325, decretaron que "la Pascua cristiana tuviera lugar el primer domingo después de la primera luna llena del equinoccio de primavera, y el domingo de Carnaval se situaría siete semanas antes de esta fecha".

Sucesivamente, la Iglesia impulsó el año eclesiástico haciendo que las fiestas fueran más solemnes, así nacieron la Circuncisión del Señor (1 de enero) y la Invención de la Santa Cruz (3 de mayo). El esplendor del culto medieval generó la festividad del Corpus, celebrándose por primera vez en Lieja (1246).

Por otra parte, las fiestas dedicadas a la Virgen fueron en aumento tras el concilio de Efeso (siglo V) y por las nuevas ordenes mendicantes. A estas fiestas añadieron los cristianos otras muchas dedicadas a mártires y santos: san Esteban, san Lorenzo y san Martín, y su veneración dio origen a la literatura hagiográfica; se aumentaron las actas de los mártires, algunas sin rigor histórico pero que gestaron los Martirologios (Sinaxarios en oriente) que eran listas de los santos mas venerados con la indicación de la fecha de su muerte o martirio. Ya en el S. XVII, aunque tratado en el largo concilio de Trento, las fiestas de precepto se habían disparado en número, como en la antigua Roma, pues los obispos tenían facultad de prescribirlas en sus diócesis respectivas. Por eso, el papa Urbano VIII en el año 1642, Bula Universa, redujo "a 34 las fiestas mayores, fuera de los domingos".

Después de Urbano VIII hubo otro recorte, dado que en algunas ciudades el número de días festivos casi se equiparaba con los no festivos, esta "poda" la llevó a cabo el papa Pio X (1911) "para favorecer a las clases mas pobres".

Antes, el calendario español (1910) señalaba 40 días de fiestas de guardar, que además de las clásicas figuraban, entre otros: san Joaquín, san Isidro, Miércoles de Ceniza y los días del cumpleaños del rey, de la reina así como de su matrimonio. Además, en el sector rural, se contaba con las festividades de sus santos devotos y milagreros: san Blas, san Antonio, san Roque, etc.; con la llegada de la República (1931) se suprimieron las celebraciones reales, instaurándose otras alusivas; como el gobierno de Franco lo hizo con el 18 de julio.

La reforma fue concluida con el Concilio Vaticano II que elaboró unas "Normas generales sobre el Año Litúrgico" que ordenaban que los santos de importancia universal se celebraran en toda la Iglesia; los otros, inscritos o no en el calendario, quedaban a la discrecionalidad del lugar.

Necesariamente, estas "normas", provocaron un movimiento en el calendario hasta entonces vigente que se manifestó finalmente en la desaparición de unas fiestas y el desplazamiento de otras. Respecto a las primeras, hacia referencia a las conmemoraciones sobre las que los hagiógrafos no habían constatado noticias históricas significativas y, aunque provocaron la ira general en alguna localidad, fueron barridas del almanaque festivo; así bajaron de su pedestal, como santos de raigambre universal: san Cristobal, santa Bárbara, santa Catalina, etc., así hasta 25 festividades cuyos santos respectivos fueron "degradados". Respecto del desplazamiento santoral, esto acaeció a otros tres de "importancia general", dado que sus onomásticas caían en tiempo de cuaresma: fueron san Gregorio Magno (pasó del 12 de marzo al 3 de agosto), santo Tomas de Aquino (del 7 de marzo al 28 de enero) y san Benito (21 marzo al 11 julio).

Finalmente, en los pueblos españoles que bailan al compás de las estaciones del año, las fiestas cambian pero siguen y actúan en simbiosis con el tejido social más ancestral; cambian las fiestas, porque cambia la gente, no porque en los lugares se vayan los de aquí o retornen los de allá, cambian como han cambiado las costumbres. En el devenir de la historia, las fiestas y tradiciones también permanecerán en este milenio, aunque cambiando, como así lo han hecho, desde que los pueblos empezaron a evolucionar; y, en el futuro, puede que sea tradición lo que hoy se nos antoja novedoso.

Volver al principio del artículo             Volver al principio

Fotografía infrarroja con cámaras digitales

Luis Monje Arenas

Hace unos días alguien me preguntó si era posible usar una cámara digital para hacer fotografía infrarroja o, lo que es lo mismo, si los CCD se excitan con el infrarrojo.

Pues bien, este fin de semana me he llevado a casa un filtro de gelatina Kodak Wratten Nº 87 que es opaco a la luz visible y permeable al infrarrojo (el filtro es negro) y he tirado una docena de fotografías con resultados más que satisfactorios.

Os explico un poquillo como lo he hecho...

El Wratten 87 es un 10% permeable a partir de los 750 nm y aumenta su transmitancia hasta llegar al 80% a los 850 nm, alcanzando su máximo de 90% a los 1.100 nm y prolongándose así hasta al menos la región de los 1.500 nm (desconozco si la gelatina tiene alguna opacidad más allá de los 1.500 nm, o si el límite lo marca el vidrio del objetivo). Recuerdo que en espectrometría su usaban celdillas de plástico por la opacidad del vidrio ordinario a ciertas zonas del IR.

Hay otros filtros Wratten en la serie 87 (87c, 87b y 87a) que ofrecen su permeabilidad cada vez más lejana del visible.

Podéis ver respectivas sus curvas aquí: 

wratten.jpg (28683 bytes)

La cámara usada ha sido una Nikon Coolpix 990 montada sobre trípode y con el Wratten sujeto chapuceramente a mano cubriendo el objetivo.

La cámara ha de ajustarse en modo Blanco y Negro ya que, por algún motivo que desconozco, no salen en color, posiblemente hay algún filtro digital de corte que elimina el IR.

Las zonas ideales a fotografiar son las de vegetación espesa y con gran variedad de albedo, ya que vamos a intentar captar lo que estas plantas reflejan y la variedad embellece las fotos. Las fotos solo resultan interesantes a pleno sol y tanto mejor si tenemos éste a nuestra espalda.

El mayor problema viene en el enfoque, ya que como recordaréis la luz roja se refracta menos que la media (zona verde-amarilla), lo que da lugar a que la imagen se forme más allá del plano de la película/CCD y, en consecuencia, la imagen salga borrosa y desenfocada.

Podríamos pensar que una solución a esto sería el cerrar mucho el diafragma, para aumentar la profundidad de campo, pero aquí, al igual que en la fotografía tradicional, ocurre un fallo de la ley de no reciprocidad de baja intensidad, peor en versión CCD, que se traduce en un notable incremento del ruido electrónico y de la degradación de la imagen. Esto tampoco es mucho problema, por que luego en Photoshop se puede eliminar con el filtro "polvo y rascaduras" que, aunque al profano le suene a noche de parranda y ladillas, puedo asegurar que con un valor 1 ó 2, es bastante efectivo para depurar la imagen.

Otra solución es enfocar en un punto más cercano y congelar el enfoque allí.

Para estimar de forma aproximada cuál es el punto idóneo de enfoque, podéis usar 5-7 metros para una focal de 50mm o llevaros una SLR con un buen objetivo normal de los antiguos, en que se ve bastante bien la marca de enfoque IR y simular las condiciones de enfoque en dicho objetivo.

En fin, mejor veis los resultados y si algo no ha quedado claro, no dudéis en preguntármelo.

monjeb.jpg (22609 bytes)

Luis Monje Arenas
Fotografía Científica
Universidad de Alcalá
luis.monje@uah.es
http://foto.difo.alcala.es

Volver al principio del artículo             Volver al principio

GENOMA HUMANO Y CLONACIÓN: PERSPECTIVAS E INTERROGANTES SOBRE EL HOMBRE 

CONCLUSIONES del CURSO de VERANO en la UAH

Nicolás Jouve de la Barreda y Gabriel Gerez Kraemer (directores del curso)

Se define el genoma como el conjunto global de la información genética que existe en las moléculas de ADN del núcleo de la célula inicial (el cigoto), y que se conserva invariable en todas y cada una de las células de un individuo.

Con validez universal, se puede afirmar que la vida humana comienza en el momento mismo de la fecundación, ya que en el cigoto existe el programa completo de desarrollo de un nuevo ser humano, con una identidad propia que es la misma desde la concepción hasta la muerte. Todo lo que ocurre después consiste en el cumplimiento de ese programa, en expresiones genéticas diferenciales en espacio y tiempo. Mediante este programa se produce la diferenciación celular de tejidos y órganos, durante el desarrollo embrionario y la vida del individuo, en todas las etapas de su desarrollo, desde el feto al adulto. En la doble dimensión del desarrollo biológico -espacial y temporal- no cabe hablar ni de identidades parciales, ni sucesivas.

Las actividades encaminadas a conocer nuestro genoma básico corresponden a lo que se ha dado en llamar genómica estructural, que trata de descifrar todo el mensaje del genoma humano. El principal reto se refiere a qué genes, en qué orden, dónde y cuándo se expresan en relación con el desarrollo, que es lo que se denomina genómica funcional.

Algunas de las principales aportaciones de la genética, la biología molecular y el proyecto genoma humano, se hallan en tres campos de la medicina: preventiva, curativa y farmacológica. Existe una gran diversidad de tipos y causas de enfermedades en cuanto a las alteraciones que se pueden apreciar en el ADN, y una gran complejidad de factores genéticos que intervienen. Hay justificadas expectativas en el campo del diagnóstico de enfermedades genéticas, si bien es más difícil el establecimiento de métodos de terapia génica para muchas de ellas.

Por lo que se refiere a la clonación, existen diversas modalidades. La llamada terapéutica trata de justificar su utilidad en medicina curativa, y plantea una seria objeción moral por la utilización de ovocitos para dar lugar a embriones, como medio para la creación de tejidos y órganos. La salida estaría en el uso de células troncales de adulto. Respecto a la reproductiva, obedece a diferentes razones, consiste en la creación directa de embriones clónicos y plantea serias objeciones éticas.

Las posibilidades que se abren como consecuencia de los avances biotecnológicos exigen delimitar qué es el hombre, de tal forma que el progreso al que invitan sea realmente adecuado a él. El proyecto genoma humano y la investigación en torno a la clonación constituyen, por lo tanto, una ocasión privilegiada para responder a esa pregunta.

Lo humano no coincide con lo natural ni con lo científicamente posible. En efecto, el hombre – conforme a la tradición católica – es una unidad de cuerpo y espíritu. El ser humano se relaciona a través del cuerpo, elemento fundamental de la persona. Ésta no es un organismo cerrado en sí mismo sino que es el único ser viviente consciente de su existencia – capaz de decir "yo" – y de la existencia del mundo, lo cual le coloca más allá del mundo y reclama a un origen "misterioso" (divino).

Las técnicas de fecundación y de clonación olvidan estas características. Frente a la procreación natural, resultado de un acto gratuito donde el hijo es algo dado y por ello no perteneciente a sus padres, la procreativa -es decir, la reproducción artificial a través de la técnica- convierte la concepción en un hecho de producción, y al hijo en un "bien patrimonial" objeto de pertenencia.

Volver al principio del artículo             Volver al principio

José María Saz Díaz (en nombre de UNIVERSITAS)

En nombre de la Asociación para la Investigación y la Docencia UNIVERSITAS, deseo manifestar mi satisfacción por el interés despertado hacia este curso de verano. De lo cual es reflejo el gran número de alumnos que han solicitado inscribirse, que ha superado a las 160 plazas disponibles.

Desde el punto de vista de la naturaleza de la propuesta educativa, ¿en qué ha consistido la novedad del método vivido estos días?:

Sobre todo, en ponernos frente al problema del genoma y de la clonación haciendo juntos un camino en el uso de la razón. Una razón que cuando mira a la experiencia descubre que ésta es más rica (compleja) que lo que cada uno desde su área de conocimiento (Biología, Derecho, Filosofía, etc.) alcanza a ver. De ahí el carácter interdisciplinar del curso.

Por otro lado, este "afrontar juntos" que hemos experimentado aquí es esencial al método de conocimiento de la razón. Por eso el curso se ha planteado principalmente como un diálogo con nuestros propios alumnos y compañeros, y no un asunto para especialistas. En este sentido y de una manera particular, la experiencia de aquellos de nosotros que participamos desde hace tiempo en la vida universitaria a través de UNIVERSITAS evidencia que nuestra capacidad de comprender la realidad ha aumentado. Y esto mismo también nos ha sucedido a todos en estos días. Así pues, no separar la razón de la experiencia implica también continuar dentro de esta relación, que para algunos puede constituir un inicio y para otros es algo que se viene dando ya.

Finalmente, la razón que mira a la experiencia abarca también el interés y afecto por las cosas y, sobre todo, por uno mismo. Porque la pregunta de fondo que está presente en todo lo que afrontamos es la misma que nos hemos hecho estos días: ¿qué es el hombre? ¿quién soy yo?

Para terminar, quiero agradeceros de nuevo vuestra participación en el curso, y reiterar mi invitación a continuar en esta relación como método de trabajo. También deseo expresar mi agradecimiento otra vez a las autoridades académicas de las universidades de Alcalá y San Pablo CEU que han hecho posible esta iniciativa. Y de manera particular, a los directores del curso y ponentes que han intervenido en el mismo.

Volver al principio del artículo             Volver al principio

RECORTES

Los expertos alertan de la ‘desastrosa’ formación científica en secundaria

El Senado crea una ponencia para buscar un remedio que permita competir con Europa

CARMEN MORÁN. Diario "El País". Madrid, Viernes, 14 de septiembre de 2001

Representantes de las reales sociedades de Matemáticas, Física y Química mostraron ayer en el Senado su preocupación por el ‘desastre’ que puede suponer para el futuro científico y tecnológico español la ‘escasa formación’ en ciencias que están recibiendo los alumnos de secundaria. Este ‘analfabetismo funcional’ que se traslada al ámbito universitario dejará al país en unos años ‘con pocas posibilidades de competir en Europa’, dicen. Las notas de esas materias en secundaria son muy bajas y cada vez hay menos alumnos interesados por carreras de ciencias.

Los miembros de las sociedades de Matemáticas, Física y Química expusieron a los senadores de una ponencia especial, que inició ayer sus trabajos, su opinión de que los desajustes de la reforma educativa están teniendo ‘graves’ consecuencias. A la reunión de ayer seguirán otras con el fin de alcanzar en unos meses unas conclusiones que puedan ser incorporadas a la futura Ley de Calidad, que reorganizará los estudios de secundaria y el acceso a titulaciones superiores.

Ya hace algunos años que los profesores universitarios vienen detectando el ‘bajo nivel’ en ciencias con el que los alumnos llegan a la universidad. Para tratar de paliarlo algunas facultades, como la de Matemáticas de la Complutense de Madrid, han añadido un curso cero a los años propios de la carrera. Se trata de un curso intensivo de unas semanas para los alumnos que ingresan en el que se trata de poner al día los conocimientos científicos de los estudiantes, para que no arrastren lagunas durante la carrera que mermen su formación final.

La deficiente formación en estas asignaturas se ha convertido en una barrera insalvable que está alejando a los estudiantes de las carreras de ciencias. Eso se observa con claridad en las notas de corte para acceder a estas titulaciones. Carlos Pico, miembro de la Real Sociedad de Química, explicó ayer que para iniciar carreras tradicionalmente de prestigio, como la Ingeniería de Caminos, sólo se necesita en la actualidad conseguir un 5,00 en la Selectividad. Esta nota de corte indica la baja demanda existente para cursar estos estudios. El estudio está hecho en la comunidad de Madrid, ‘pero puede extrapolarse a otras comunidades’.

Pico presentó además ante los senadores que forman esta ponencia un estudio en el que se observa cómo alumnos que han superado la selectividad con un suspenso en matemáticas, física y química se decantan luego por carreras de ciencias. Consiguen aprobar en Selectividad porque las notas en otras asignaturas les compensan la nota media.

El presidente de la Sociedad de Física, Gerardo Delgado, considera que, aunque el problema arranca en los primeros cursos, en secundaria está alcanzando ‘niveles de desastre’. La falta de apoyo y recursos para el profesoreado y la disminución de las horas semanales que se dedican a estas asignaturas serían las principales causas de ese ‘desastre’. ‘Los profesores se quejan de que prácticamente el 20% del tiempo de cada clase lo emplean en poner orden’, dice Delgado. Eso desmotiva a los alumnos más brillantes, que pierden el interés por las explicaciones. ‘En las asignaturas de ciencias es más difícil recuperar esas lagunas porque son materias acumulativas’, si no aprenden el primer escalón no pueden subir al segundo, lamenta Carlos Pico. ‘En matemáticas no basta con quedarse con la música. Son como un poema: si no se sabe la letra, no rima’. ‘He visto exámenes de acceso a la universidad en Gran Bretaña que asustarían a los alumnos españoles, porque tienen un nivel de primer curso de carrera’, añade.

El catedrático de Matemáticas Miguel de Guzmán está de acuerdo en extender los estudios obligatorios hasta los 16 años, pero ‘sin apoyar a los profesores para que atiendan a un alumnado cada vez más heterogéneo, la situación es ruinosa’.

Guzmán dice que el nivel español de producción científica (publicaciones de investigaciones matemáticas) se ha recuperado en 30 años de un 0,4% a un 4,30%, ‘algo que no podrá sostenerse a partir de ahora con la preparación de los actuales estudiantes’. ‘La formación de los profesores es buena, pero el sistema se viene abajo’, asegura. A su juicio, las alrededor de tres horas semanales de matemáticas (dependiendo de las comunidades) no son suficientes para mantener el nivel requerido.

Gerardo Delgado añade además el poco o nulo uso que se hace de los laboratorios por falta de tiempo. ‘Habría que desdoblar los grupos de alumnos y para eso se necesitan más horas’. Estas enseñanzas prácticas, dicen los expertos, son necesarias para la formación e imprescindibles para ‘atrapar el interés de los alumnos’ por la ciencia. Pero han perdido terreno frente a las clases teóricas ‘que se imparten a toda velocidad para poder explicar todo el temario’. En el estudio presentado por Carlos Pico se habla de ‘analfabetismo funcional entre los bachilleres’ y de ‘patética insuficiencia de lenguaje físico-matemático’.

A la cola en las olimpiadas

La Real Sociedad Matemática Española organiza olimpiadas anuales desde 1964. También las hay de Física y Química. Los alumnos, preuniversitarios, que participan en estas pruebas académicas, primero regionales y luego nacionales, acaban compitiendo con sus compañeros europeos. Para algunos profesores estas olimpiadas no son el medidor más acertado para calibrar el nivel de los estudiantes; para otros, los resultados que obtiene España indican, al menos, las deficiencias del sistema educativo. ‘Estamos a la cola en la Unión Europea junto a Portugal y Grecia’, dice Carlos Pico, ex presidente de la Real Sociedad Química Española. En matemáticas, sobre una puntuación máxima de 252 puntos, los representantes españoles consiguieron el año pasado 29, la mitad que Francia e Italia y mucho menos que Gran Bretaña (96) y Alemania (108). En otros países, como algunos del Este, los estudiantes consiguen extraordinarios resultados, pero Pico aclara que dedican muchísimo tiempo a preparar esta competición por lo que no es una comparación válida. Los estudiantes españoles que consiguen superar las fases regional y nacional son ‘talentos’, y aún así no están a la altura del resto. Los expertos se preguntan si tal y como está el sistema educativo no se estarán desperdiciando cerebros que podrían ser grandes científicos en el futuro. La ‘desastrosa’ formación que reciben en las materias científicas les aleja de los números y cada vez son menos los que se decantan por carreras de ciencias, explican. El presidente de la Sociedad de Física, Gerardo Delgado, considera que a los niños hay que iniciarles a muy temprana edad en el disfrute de las ciencias. ‘Hay que contestar a los niños cuando preguntan sobre cuestiones de ciencia, aunque todavía no sepan leer o escribir. A esas edades no se preocupan por Kant o Cervantes, pero sí preguntan por qué bota una pelota’.

Volver al principio del artículo             Volver al principio
linea.gif (922 bytes)
Vivat Academia, revista del "Grupo de Reflexión de la Universidad de Alcalá" (GRUA).
Tus preguntas y comentarios sobre este Web dirígelos a vivatacademia@uah.es
Copyright © 1999 Vivat Academia. ISSN: 1575-2844.  Números anteriores. Año III
Última modificación: 12-10-2001