LAS FRASES DEL MES:

Lucharé hasta la muerte para que tú puedas decir lo contrario de lo que yo pienso.

Voltaire

No temas enfrentar riesgos; es corriendo riesgos que aprendes a ser valiente.

Anónimo

Vivat Academia, décimo aniversario

Han pasado diez años desde aquel noviembre de 1998 en que apareció el número cero de Vivat Academia. Con mucha timidez y carácter claramente localista, pensada para dar salida a la opinión, en libertad, sobre la Universidad de Alcalá, suponiendo que la participación podría cambiar su trayectoria claramente descendente, comenzó sus singladuras mensuales. Desde entonces, con más o menos dificultades temporales para editar cada número, no hemos faltado a la cita de los 10 ejemplares anuales. Felicitamos a nuestros lectores por este logro y nos felicitamos nosotros por no haber sucumbido al desánimo que, en más de una ocasión, nos ha invadido.

En nuestro objetivo inicial –lo reconocemos sin rubor- hemos fracasado estrepitosamente. La Universidad de Alcalá no ha mejorado ni un ápice. No solamente no ha habido progreso alguno, sino que su declive hacia la conversión en "guardería" de "adultos recién estrenados" es tan pronunciado que parece imposible remontarlo. La colaboración de la comunidad universitaria alcalaína en la redacción de la revista ha sido escasa, demasiado escasa, para lo habitual en estos casos. Ello demuestra, sin lugar a dudas, que el deterioro de nuestra Institución ha sido constante. Cuando una colectividad es dinámica, muestra su interés por perfeccionarse participando en cualquier actividad propuesta. No es el caso de la UAH; el personal y los estudiantes han adoptado una actitud demasiado pasota, incluso claramente crítica, cuando se opinaba en libertad.

Por alguna misteriosa razón, la comunidad universitaria alcalaína está muy conforme con el rumbo, a nuestro parecer equivocado. Quizás sea una reacción natural, pues si andamos erradamente, mejor que no se sepa.

No obstante lo anterior, estamos orgullosos de unos cuantos ex alumnos que continúan, contra viento y marea, sacrificando su tiempo libre, sin recibir nada a cambio, haciendo posible que VA vea la luz todos los meses. Nuestro sincero agradecimiento a ellos y sus familias por el servicio prestado a nuestra Universidad, de la que ya nada tienen que esperar. Junto a ellos, varios fieles colaboradores, españoles y extranjeros, incluso ajenos al mundo universitario, han sabido mantener la ilusión del equipo de redacción y vencer las muchas tentaciones de tirar la toalla.

Muchos han sido los problemas a resolver en esta década. Todavía recordamos las feroces críticas de nuestros comienzos, amén de los intentos de cierre. El enlace a VA está perdido entre los "otros web" del portal de la UAH. Se nos ha negado reiteradamente el anuncio de su aparición mensual en la agenda de los servicios de información, bajo el pretexto de que Vivat Academia no es de interés general. Pese a todas las dificultades, hemos conseguido ampliar su ámbito de interés, primero a nuestro entorno más cercano, la ciudad de Alcalá, para más tarde extenderlo a espacios nacionales e internacionales. En los comienzos, casi el 100 % de lectores eran miembros de la UAH. Enseguida la revista se empezó a leer en todo el territorio español y ahora, tras estos diez años de existencia, sólo el 42 % son entradas procedentes de éste, y, de ellas, un exiguo 10 % de miembros de la Comunidad Universitaria alcalaína. No son pocos los lectores extranjeros que utilizan nuestra portada como página de inicio de su navegador, según nos han informado, a fin de no perderse cada nueva edición. En consecuencia, nuestro fracaso ha sido exclusivamente local, lo cual confirma aquello de "nadie es profeta en su tierra".

Vivat Academia supone, a nivel mundial, una de las primeras revistas publicadas únicamente en Internet –quizás la primera en España- y, desde luego, una de las pocas que han conseguido sobrevivir, aumentando mes a mes el número de lectores.

Aprovechamos esta ocasión para informar a nuestros lectores que algunos profesores de la Universidad Complutense, del área de cinematografía e información, han mostrado interés en convertir VA en una revista, además de orientada a la divulgación, destinada a la publicación de trabajos de investigación inéditos. Estamos en trámites para que sean ellos quienes marquen las líneas editoriales del futuro, sin perder la vocación inicial de difundir la opinión de todo aquel que quiera manifestarla en la libertad y el respeto. Les aseguramos que seguiremos manteniendo nuestra intención de entretenimiento y servicio, publicando, sin censura, todos los artículos recibidos, salvo, claro está, los que atenten contra los derechos fundamentales del hombre. Mantendremos la negativa de divulgar noticias relacionadas con actos terroristas, porque el deseo de los que practican el terrorismo es la difusión de sus "hazañas", y no vamos a entrar en ese juego. Y si no lo pudiéramos hacer así, por las causas que fueren, echaríamos el cierre.

Gracias a todos aquellos que nos han sido fieles y felicidades por este décimo aniversario.

LA REDACCIÓN

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